Informa 'The New York Times'.
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A finales de 2010, Al Qaeda cobró 5 millones de dólares de rescate por un secuestro que ellos habían perpetrado, y el grupo terrorista tuvo que decidir qué hacer con ese 'golpe de suerte'. En medio de la incertidumbre causada por crisis financiera, Bin Laden se mostró muy optimista ante las posibilidades del metal precioso, informa 'The New York Times'.
En una carta que escribió en diciembre de 2010, Bin Laden
instruyó al administrador de Al Qaeda para que reservará un tercio del rescate
(cerca de 1,7 millones de dólares) para comprar lingotes y monedas de oro.
"La tendencia general de los precios es al alza",
escribió Bin Laden en una carta que fue interceptada en 2011 y desclasificada
el mes pasado por la Agencia Central de Inteligencia (CIA). "Incluso con
descensos ocasionales, en los próximos años el precio del oro alcanzará los
3.000 dólares la onza", sostenía.
Bin Laden falló su pronóstico, ya que el oro se situó en un
máximo de 1.900 dólares la onza cinco meses después de su muerte en 2011. No
obstante, según indica el medio, él líder terrorista parecía tener un agudo
sentido del espíritu de la época financiera, y su creencia en el brillante
futuro del oro fue compartida en su momento por muchos estadounidenses y un
gran número de celebridades financieras.
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"Siempre ha habido especulación acerca de cómo Al Qaeda mantiene el exceso de capital", sostiene Juan Zarate, asesor adjunto de seguridad nacional durante el Gobierno de George W. Bush. "Ellos empezaron a preocuparse porque pudieramos hacer cosas con el dólar que influyeran en su capacidad para acceder a él", añadió.
En el momento en que Bin Laden escribió la carta,
"claramente no quería tener nada que ver con los dólares de Estados
Unidos, que, según temían muchos milicianos islamistas, podían exponerlos a la
justicia estadounidense", escribe el medio.
No obstante, si Al Qaeda compró oro cuando Bin Laden lo
aconsejó, fue una mala apuesta, según indica el medio. El 3 de diciembre de
2010, día que su carta estaba fechada, el oro cerró en 1.414 dólares la onza.
Hoy en día, el precio es de alrededor 1.230 por onza.
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